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jueves, 17 de abril de 2014

Una maleta para guardar tú vida



¿Guardáis algún recuerdo tremendamente bonito o tremendamente doloroso en vuestra mente?. A todos nos ocurren cosas que siempre decimos "jamás olvidaré", sea por lo maravilloso que es o justamente por lo contrario. 

Alguien una vez me dijo que nuestra vida es como una maleta, con diferentes compartimentos para guardar aquello que es especial de manera bonita o aquello que no lo fue tanto, pero que en ningún caso, nadie de nosotros recordarémos el día de mañana (cuando pasen muchos muchos años) cada día de nuestra vida, por la sencilla razón de que todo lo que nos ocurre uno y otro día suelen ser cosas muy parecidas y al final lo único que nuestra mente y nuestro corazón guarda es aquello que realmente "importa". 

Yo creo, desde mi punto de vista, que esa teoría lleva bastante de razón, porque si cada uno de nosotros recordara absolutamente todo, nuestra mente llegaría un momento que se colapsaría. Y echando la vista un poco atrás (no tanto porque no tengo tantos años) es cierto que no recuerdo todos y cada uno de mis días y que guardo días fantásticos que jamás podría olvidar y días tan dolorosos que también sé que no podré olvidar. 

Yo pienso que finalmente esto es un viaje, y vamos llenando la maleta de cosas que son importantes y que sabemos que necesitaremos, y otras en cambio las guardamos por si acaso y luego no les daremos tanto uso, e incluso se nos olvidarán cosas que podremos comprar cuando lleguemos a nuestro destino y otras que aunque compremos no serán lo mismo que lo olvidado en casa, lo importante al final no es sólo lo que nos llevamos en nuestra maleta si no el recuerdo de ese viaje, las fotos que consigamos hacer. 

Lo importante al final es el cúmulo de lo que ese viaje representó en nuestra vida, porque de eso dependerá que nuestra maleta esté llena de bonitos o no tan bonitos pero imporantes recuerdos.

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