Páginas

martes, 12 de enero de 2016

Quiero...




Yo quiero que lo tengas todo. Que te levantes cada mañana sin que eches de menos absolutamente nada. Y que te asomes por la ventana e incluso si llueve tengas un paraguas en tu mano. 

Me gustaría que lo que esperes de la gente sea lo que tú imaginaste, que nadie te haga daño, ni si quiera en las peores de las pesadillas. Quiero que tu salud jamás se resquebraje, ni que nadie de los tuyos pase por enfermedades. 

Quiero un mundo exquisito para tí, de esos de cinco cubiertos y que el buffet sea tan libre, que puedas pillarte un atracón sin que te siente mal al estómago. 

Deseo que si te caes lleves rodilleras, y que si no las llevas haya un colchón debajo. 

Y yo prometo que haré todo lo que esté de mi mano para protegerte. Y que si lloras, estaré a tu lado, y que si estás triste sólo sean cinco minutos y después vengan las mayores de las alegrías, porque como bien dicen: después de la tempestad, viene la calma. 

Quiero lo mejor para tí, porque sí, porque te lo mereces. Y en esos días en los que no sepas qué hacer, te sientes de frente a tu ordenador, y encuentres tan sólo dos minutos para sentarte aquí conmigo... en la habitación de Lorefield.
D. Lorefield

Empezamos. Bienvenid@s a 2016, bienvenid@s a mi vuestra casa. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario