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martes, 23 de febrero de 2016

¡¡¡¡ QUIERO TU PELO !!!!



Una de las cosas que tiene un mundo virtual, es la superficialidad, y más concretamente en Second Life, y cada año que pasa, mucho más. Yo quiero hacer mención a una entrada de los que yo considero mis amigos, Disfruta Second Life

Habla concretamente del cambio que ha experimentado SL durante todos estos años. Los avatares que entrábamos antes, éramos "más pacientes" a la hora de aprender y para nosotros, no era tan importante el ser "alguien pixelado perfecto"  para poder estar listo para lo que haga falta. Más bien el caminar sin chocarme, o no quedarme calva era una de las cosas que yo me afanaba en aprender. 

Dentro de que la estética siempre es importante casi en todos los lados, sí que es verdad que los avatares que entran ahora, quieren ser guapos y perfectos ahora. Y yo ... no me habitúo a tanta superficialidad, a tanta falta de respeto y a tanta pesadez junta. Yo soy del 2008, perro viejo, como aquel quien dice, y desde siempre, mi paciencia ha sido más o menos baja para este tipo de personas que te asaltan y te dicen "quiero tú pelo", perooooooooo, vamos a verrrrrrrrrrrrrrrr, ¿os imagináis en RL diciendo a alguien "quiero tu pelo?", te mirarían con cara de "está chalada", eso como mínimo. Nada, pues en Second Life eso pasa cada día y entonces le das la información "cuesta 250 Lindens y es de Truth" y entonces lo siguiente que lees es "cómo se gana dinero?", y ahí es cuando echo humo de verdad. Yo vengo de Xploders, de sillas, de acampar... (como digo soy perro viejo) y me costó un triunfo tener mi pelo, mi casa, en resumidas cuentas, mis cositas. Eso por no mencionar que yo sentí mi avi "mío" después de llevar en Secon Life año y medio (más o menos). 

Yo a este tipo de personas, les diría que traten de divertirse, de pasarlo bien, de ir aprendiendo las cosas de este mundo despacio, que todo conlleva un tiempo para poder sentirte agusto con tu avi. Que hablen, que interactúen, incluso que aprendan idiomas hablando con otras personas de otros países. Que es un mundo realmente estupendo donde se pueden hacer millones de cosas aparte de ser un pixel bonito. Que descubran lugares que otras personas han creado sin ningún tipo de ánimo más que para que el resto nos divirtamos. Que viajen, que vuelen, que bailen... pero sobre todo que HABLEN. 

Second Life es un mundo creado por gente como nosotros y yo comprendo que los "avis más antiguos" debemos tener más paciencia con los "avis más nuevos", pero creo que entre todos podemos hacer que Second Life sea un lugar como antaño (por supuesto no todo el mundo busca lo mismo) pero entre todos podemos hacer que este mundo no decaíga, porque es por todos nosotros que esto sigue en pié y de nosotros depende que esto siga en marcha. 

Aprovecho la entrada, por si lee, para decir que yo entro poco (y cada vez menos) a esta segunda vida, porque en la mía necesito un extra de otras 24 horas más para poder vivir (jajajaja) para decir que yo aunque entro poco, últimamente me acuerdo mucho de Bolo, aquel con quien descubrí lugares maravillosos en Second Life que había hecho gente como nosotros. Pues eso, si lees, Bolito, se te echó y se te echa de menos, porque aunque entro poquito, gente como tú es la que hace falta en cualquier L del mundo mundial, y cuánta razón llevabas en muchas cosas que me dijiste, amigo.



Serás todo lo guapa que quieras, pero dime... si el mundo fuera ciego, ¿a cuánta gente impresionarías? Sabina

martes, 16 de febrero de 2016

Ruido


Nunca me gustó el silencio. De verdad. Me dicen que soy inquieta, y no es que yo me considere movida, pero no me gusta nada el ruido del silencio. No me gusta, porque me vuelvo sorda. Necesito estar en movimiento.

Necesito el ruido de manera constante. Cuando era chica, cuando mi madre se tumbaba en la cama, y cerraba los ojos, yo iba corriendo a pedir que los abriera y me ponía tremendamente nerviosa. Imaginaros, yo era tan pequeña que no recuerdo esos momentos ni lo que yo sentía para decirle aquello.

Y cada año que pasa, me gusta menos el silencio. Siempre tengo que estar haciendo cosas, en pleno movimiento con pleno ruido. Y esto se hizo todavía más fuerte cuando tuve mi tercer aborto y coincidió con el fallecimiento de mi mejor amiga.

No me importa decirlo: necesito movimiento. No tengo miedo de estar conmigo misma, sólo es que me gusta el ruido, demasiado, me encanta el movimiento. Lo reconozco, yo soy diurna, del sol y de todos los ruidos posibles, música, pasos, tele, conversaciones... yo soy amiga de todo aquello que no me deje sorda ni por un segundo de mi vida, y si hay algo que me ensordece, ése es el silencio.


martes, 9 de febrero de 2016

"Llamar pequeña a la persona más grande. Llamar fea a la cosa más bonita del mundo. Llamar idiota a la persona que te hace sonreír".

Yo simplemente, con total sencillez, lo llamaría dislexia. Dislexia por no ver lo que tienes de frente, a pesar que tienes ojos. Dislexia por no darte cuenta de la mano que te agarra cada día para que no caigas. Dislexia.... yo conocí tanta, pero tanta gente disléxica...
D. Lorefield



martes, 2 de febrero de 2016

Cual es tu número?




¿Cuántas personas en alguna ocasión o a lo largo de su vida se han dejado llevar por aquello que dice la gente de su alrededor?. El otro día vi una película que me hizo pensar. Nunca lo había pensado más de cinco minutos, pero ¿cuántos de nosotr@s nos hemos dejado llevar por aquello que nos ha dicho la gente?. Cuando hablo de gente, no hablo sólo del exterior, gente con la que has estudiado, tus vecinos, amigos, conocidos, o amigotes y amigotas, si no también tú gente, personas que te quieren y a las que quieres.

Tras un despido y por puro aburrimiento en el trayecto a su casa, Ally decide leer el artículo de una revista que guardaba dentro de un cajón con las pertenencias que tenía en su oficina, donde dice que las personas que se han acostado con más de 20 personas acaban solas. Ella, sola, decide contar con cuántos chicos ha estado más allá de los besos y descubre entonces que su cupo está al máximo y que por tanto, debe encontrar su amor dentro de los amores que ya había vivido. Así que se embarca en la "reconquista" de aquellos chicos con los que ha estado años atrás, sin darse cuenta que el amor muchas veces está más cerca de lo que uno mismo pueda imaginarse. ¿Por quién se decidirá finalmente?.

Sí, ciertamente es una película de las típicas, pero a mí me ha parecido bonita y me ha dado qué pensar que muchas veces hacemos lo que la sociedad estipula como mejor, e incluso muchas veces (yo he conocido casos) los padres que quieren lo mejor para sus hijos, terminan dándoles consejos de qué chico o chica "les conviene" cuando la vida de cada uno, debería de ser elegida, por cada uno.

¿Con cuántos?, o ¿what´s your number? (¿cuál es tu número?), comedia romántica, más que previsible (lo reconozco) pero me ha gustado, y por eso quería recomendarla.