Páginas

martes, 31 de mayo de 2016

A veces


Sí, realmente conocí muchas personas que aparentaron ser una cosa, y finalmente eran otra, y conocí muchas personas que parecían tener un sentimiento y después con el paso del tiempo resultó ser algo diferente. No voy a poner ejemplos de ningún tipo, yo, simplemente yo puedo asegurar que no siempre demostré lo que realmente sentía.

Hubo una época en mi vida que quería hacer ver al resto del mundo que estaba bien cuando verdaderamente no era así. Era una mezcla entre no hacer daño al que estaba a mi lado, y también un poco por creérmelo yo misma, y qué queréis que os diga?, a veces incluso me lo llegaba a creer, pero tengo que reconocer que pocas veces, aunque por pocas que fueran esas veces, me sentía mejor al menos por esos 5 minutos en los que relataba lo estupendamente que estaba. Así soy yo.

Por supuesto, con el paso de los años te das cuenta que bien o mal, finalmente permanece a tu lado aquel a quien le importas, y por sorpresa te siguen escuchando aquellos a los que llamabas amigos y sí, te llevas gratas sorpresas en algunos casos y en otros, efectivamente no siempre ocurre del mismo modo, aunque... yo no soy partidaria de votar a favor de ese dicho que reza "quien bien te quiere, te hará llorar", por lo tanto, aunque no siempre sean gratas esas sorpresas, es mejor tener dentro del círculo a aquellos que sabes que lo harían todo por tí, al igual (por supuesto) que tú por ellos, y lo demás... son minucias.



"Claro que se puede ser feliz y estar muy triste.
Como se puede ser el primero y llegar tarde.
Hablar al silencio y esperar una respuesta.
No dormir porque en el pecho hay pájaros con frío."
 Las palabras perdidas, Alfredo Buxán

No hay comentarios:

Publicar un comentario